La Terapia Gestalt es una terapia perteneciente a la Psicología Humanista, que se caracteriza por no estar hecha exclusivamente para tratar enfermedades, sino también para desarrollar el potencial humano.
Se centra en la vivencia que tiene la persona que solicita ayuda en el momento presente, en la forma de relacionarse con el resto de personas, así cómo en la forma de ser/estar en el mundo y la capacidad que tiene para autorregularse y tomar sus propias decisiones.
Es un tipo de terapia que se enfoca más en los procesos que en los contenidos. Pone énfasis sobre lo que está sucediendo ahora, se está pensando en el presente y sintiendo en el momento. En este sentido, se habla del aquí y ahora, no para dejar de lado la historia de la persona, sino más bien que esta historia se mira desde el presente, cómo se viven, cómo afectan, etc. los hechos pasados a día de hoy. La persona es quien es, entre otros, por lo que ha vivido. Se trata de mirar al pasado para entender cuál es nuestro presente, y resolver desde el ahora las cuestiones que nos impiden avanzar en la dirección que deseamos.
Desde la perspectiva de la Terapia Gestalt, prestamos atención a cómo actuamos, nuestras percepciones, nuestros impactos emocionales y qué hacemos con ellos. Pretendemos que la persona que acude a terapia sea consciente de cómo influye y es influida por su entorno y que tome mayor consciencia sobre su manera de hacer. Nos fijamos también en cómo es la vivencia de lo que hace y lo que le pasa. Uno de los objetivos es discernir qué tiene que ver con el pasado y qué ha dejado de tener sentido a día de hoy. De esta manera, aprendiendo a adaptarse y a ajustarse a cada situación, facilitamos que la persona descubra nuevas maneras más útiles de hacer las cosas y relacionarse con los demás.
La Terapia Gestalt también es heredera de la Teoría de Campo de Kurt Lewin, de donde extrae que el organismo (en este caso la persona) es inseparable, indivisible del entorno, por lo que afecta y es afectado por éste. La Terapia Gestalt, deja de mirar al individuo aisladamente para considerarlo un elemento más de la situación, de tal manera que la persona crea y es creada por la situación, es actor y actuante de ella.